La digitalización nos llevará al emprendimiento y a la especialización, por Cristina Juan – IEB School

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Nos hemos acostumbrado a trabajar con un horario fijo. Nuestra jornada laboral empieza y acaba siempre a las mismas horas y, al final del día, nos cambiamos la “corbata” por la “camiseta” para disfrutar de nuestra vida personal.

La sociedad concibe esta forma de vida como algo preestablecido, lógico y rutinario. Pero el mundo cambia. Y actualmente lo hace a un ritmo que hasta nos cuesta alcanzar. ¿Es posible que el futuro traiga consigo nuevos estilos de vida? ¿Podríamos llegar a conciliar nuestra vida laboral y personal simultáneamente y obtener la misma satisfacción por las dos partes? Y, lo que más nos inquieta, ¿La concepción que hoy tenemos de lo que es un trabajo quedará mañana en el olvido?

La mayoría de las personas entienden el trabajo como algo separado de sus vidas personales. Una necesidad, incluso una obligación, para poder pagar las facturas a final de mes. Pero esta idea está cambiando, y los motivos son varios. Una de las razones que más fuerza ha cobrado y que justifica la transformación de hábitos y de comportamiento de la sociedad es la revolución digital.

La digitalización presentará un nuevo escenario laboral

La transformación digital nos lleva a pensar que un futuro diferente es posible. El desarrollo de nuevas tecnologías como el Big Data, el Internet de las Cosas, los dispositivos Móviles o el e-Commerce, son algunos de los múltiples ejemplos que están propiciando un cambio radical en el terreno laboral. Y es que todas estas innovaciones permiten a los profesionales crear proyectos en común, aun encontrándose en distintas partes del mundo, automatizar miles de funciones que antes se hacían de forma manual o atender cuestiones de trabajo a cualquier hora del día; entre muchas otras posibilidades. En definitiva, ya no existen límites que nos impidan pensar que la sociedad puede evolucionar hacia un modelo en el que las personas crean sus propios negocios, se especializan y conciben su vida como un todo, sin distinciones entre lo laboral y lo personal.

De esta manera, es probable que en muy pocos años protagonicemos el nacimiento de nuevos empleos, lo que traerá consigo que los profesionales desarrollen nuevas habilidades y dinámicas de trabajo.

Los hábitos de los millennials son el claro ejemplo de cómo las nuevas generaciones avanzan cogidas de la mano de la tecnología. Una generación que en 2020 será el 50% de la fuerza de trabajo y que, inevitablemente, impondrá nuevas estructuras digitales en las empresas. Además se está detectando que los millennials priorizan el trabajo en equipo, las colaboraciones y el emprendimiento; alejándose cada vez más del empleo de mesa y ordenador y de X horas fijas la jornada.

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